Mi mamá.
De no haber sido por la mano dura de mi mamá, seguramente mi vida habría tomado un mal camino. Tal vez, hubiera utilizado drogas o con lo mucho que mi papá me consentía, hubiera sido una persona presumida o déspota, pero no, su trabajo fue excepcional, y gracias a ella, soy la Fernanda, que usted querido lector, ha venido conociendo a lo largo de este blog. Mamá, esta entrada va dedicada a ti. Ignoro que día te veré, pero me he decidido a que el día que te vea, entregarte todo lo he escrito, ya que nunca me animé a enseñarte mi blog. La idea de escribir, surgió en una de las múltiples ocasiones en las que me subía llorando a mi cuarto, llorando de la impotencia por no poder revertir el daño fisico que había hecho Wilson en mi; sentía la necesidad de expresar de alguna manera, lo mal que me sentía, así que cree este blog. Disto mucho de ser una celebridad, y tal vez nunca llegue a ser tan famosa como yuya o werevertumorro (famosos en internet), pero te puedo presumir que cada vez